Ser alumno es ser protagonista de la propia educación
Alumnos
- Participan, gradual y responsablemente, en el desarrollo y crecimiento de la Comunidad Educativa.
- Tienen derecho a que la actividad escolar les ofrezca ocasiones de crecer y madurar en todos los aspectos de su personalidad.
- Se solidarizan con los Ideales, el Estilo y el Proyecto Educativo e intervienen individual, colectiva y asociativamente en la vida escolar según su capacidad, asumiendo sus derechos y obligaciones.
Decálogo del alumno
Decálogo del alumno agustiniano
- Tiene un corazón inquieto, que lo invita a una búsqueda constante con Dios, aún después de haberlo encontrado.
- Busca momentos de oración personal y comunitaria para dialogar con Dios, nuestro Amigo.
- Es fiel al llamado que Dios le hace, poniendo sus cualidades al servicio con los demás.
- Vive los valores de Jesús que propone para su vida, caminando de la mano de Agustín, en nuestra gran familia que es la iglesia.
- Posee una profunda vida interior, para encontrarse allí consigo mismo y con Dios.
- Fundamenta sus amistades en Jesús y las vive con tal compromiso, confianza y sinceridad, que en el amigo encuentra la mitad de su alma.
- Participa de los sacramentos con alegría, sobre todo en la Eucaristía, viviéndola como un verdadero encuentro comunitario con el señor.
- Ilumina su vida diariamente alimentándose con la lectura de la Palabra de Dios.
- Siente la necesidad de formarse constantemente y de conocer a Jesús, compartiendo lo que encuentra con los demás en comunidad.
- Enfrenta la vida con esperanza, contagiándola a los que no la tienen.
Oración del alumno
Oración del alumno agustiniano
Dios, padre bueno, que nos exhortas a la oración
y nos concedes lo que pedimos.
Escúchame mientras camino entre tinieblas
y alárgame tu mano segura.
Ilumíname con tu luz y hazme salir de mis errores
para que, conducido por ti, vuelva a mí y me encuentre contigo.
Mándame lo que sea de tu agrado,
pero limpia mis oídos para que puedan escuchar tu voz
y sana mis ojos para que puedan ver tu luz.
Que yo te busque, Padre, sin caer en el error.
Sal al paso de mi vida para que conociéndome te conozca,
y pueda encontrarme contigo ya que te busco y te deseo.
Bienaventuranzas de los jóvenes
Bienaventuranzas de los jóvenes
1.Bienaventurados los muchachos y las chicas que hacen de la vida una ofrenda, un deber y una oblación.
2. Bienaventurados los muchachos y las chicas que deciden su futuro orando, consultando y reflexionando.
3. Bienaventurados los muchachos y las chicas que postergan su noviazgo hasta consolidar su voluntad, disciplinar su afectividad y madurar su inteligencia.
4. Bienaventurados los muchachos y las chicas que optan por una carrera o un oficio para servir mejor a la comunidad.
5. Bienaventurada la juventud que se enamora de Cristo y quiere proclamar ese amor.
6. Bienaventurada la juventud que sufre cuando la Iglesia y el país padecen y se alegra cuando la Iglesia y la patria triunfan.
7. Bienaventurada la juventud que trabaja por la paz y la que tiene sed y hambre de justicia.
8. Bienaventurada la juventud que busca primero el Reino de Dios y lo demás lo considera añadidura.
9. Bienaventurada la juventud orante, penitente y eucarística.
10. Bienaventurada la juventud que prefiere perder el ojo, el brazo o el pie, si ese ojo, brazo o pie son ocasión de pecado.
11. Bienaventurada la juventud que es fría o caliente porque la tibia será vomitada por el Señor…” Monseñor Zaspe